TECNICAS DE COCCION
lunes, 9 de noviembre de 2015
domingo, 8 de noviembre de 2015
domingo, 11 de enero de 2015
LIMPIAR Y ASEAR
CÓMO LIMPIAR LAS SUPERFICIES DE
LA COCINA
Es
importante mantener las superficies de la cocina limpias, ya que la suciedad y
los gérmenes están siempre presentes y pueden ir a parar a nuestro plato.
Conozcamos algunas formas naturales de mantener la cocina desinfectada y
limpia.
LIMPIAR
LAS SUPERFICIES DE LA COCINA
La cocina a la que debemos prestar mayor atención en lo
que respecta a su limpieza, orden y desinfección. Y hay una razón simple para
ello: en la cocina se preparan todos los alimentos del consumo, y la falta de
prudencia en la limpieza podría acarrear toda clase de enfermedades a cualquier
integrante de la empresa.
Aprendamos
de manera simple y natural a limpiar distintas superficies y elementos de la
cocina, para no correr riesgos y, también, cuidar de nuestro entorno y nuestra
salud.
LIMPIAR
LAS TABLAS DE PICAR
La mejor
manera de evitar la contaminación cruzada (esto es cuando, por ejemplo, las
bacterias de las carnes crudas se contagian a las verduras de consumo en crudo
al usar la misma tabla de picar) es usando una tabla específica para cada tipo
de alimento: carnes (incluso una para rojas y una para blancas), vegetales,
frutas, fiambres, y también, una diferente para los alimentos cocidos.
Pero
además de diferenciar las tablas, debemos mantenerlas impecables. Para limpiar y desinfectar una tabla
plástica bastará con frotar con un cepillo sintético, en agua
caliente y con jabón de vajilla. Para limpiar
una tabla de madera, en cambio, lo mejor es espolvorear
bicarbonato de sodio y zumo de limón, frotando con un cepillo sintético limpio
y dejando actuar antes de enjuagar con abundante agua caliente. Deja secar
bien, ya sea al aire o con un paño limpio.
LIMPIAR MESADAS Y CERÁMICAS DE LA COCINA
Al igual
que con las tablas de picar, las mesadas e islas de madera han de ser desinfectadas con
bicarbonato y zumo de limón o, en su defecto, unas gotas de vinagre blanco de
alcohol. Luego, repasa con un paño o esponja limpia, humedecidos en agua
caliente.
Las superficies de aluminio pueden
ser limpiadas simplemente con detergente para la vajilla y agua caliente, sin
usar productos químicos que pudieran dejar una película de residuos poco
convenientes. Si quieres una mejor desinfección, finaliza la limpieza frotando
con un paño embebido en vinagre blanco de alcohol y agua caliente en partes
iguales, o sólo con el vinagre.
Con esta
técnica, también puedes limpiar las superficies de granito, de mármol y
piedras naturales, frotando con un cepillo de cerdas sintéticas
para que la mezcla ingrese a los poros.
Las superficies de vidrio, cristal y espejos,
en cambio, quedarán mejor si las rocías con vinagre blanco de alcohol y frotas
con un paño suave, para desinfectarlas y también quitar la grasitud.
El acero inoxidable de las superficies y
utensilios de cocina puede quedar con una
apariencia impecable y desinfectado si los repasas con un poco de bicarbonato
de sodio, disuelto en unas gotas de agua caliente. Moja allí un paño o esponja
suave y repasa vigorosamente, deja actuar unos minutos, y repasa con un paño
humedecido en agua caliente. Finaliza secando bien, con un paño suave y limpio.
LIMPIAR LOS PISOS DE LA COCINA
Los pisos de corcho se
limpian con una mezcla de agua cálida y unas gotas de detergente o jabón de
vajilla, frotándolos suavemente con una mopa o esponja, y luego aclarando con
un paño húmedo. Procura secarlo o dejar buena ventilación para evitar la
condensación de humedad, y dale mantenimiento frecuente con aspiradora, para
evitar la suciedad acumulada.
Los pisos de madera pueden ser limpiados de la
misma forma, barriendo o aspirando previamente para evitar que el líquido
"se pegue" a la suciedad existente. Procura ventilar bien, y evita
que los residuos o manchas húmedas permanezcan en el piso, limpiándolos inmediatamente
con servilletas de papel.
Los pisos plásticos o laminados,
al igual que los de vinil, pueden ser limpiados con una taza de vinagre blanco
de alcohol disuelta en dos litros de agua. Frota con el líquido usando una
mopa, trapo o esponja, y deja ventilar al aire para una limpieza y desinfección
impecables.
Cómo Limpiar y quitar el mal olor a
los Utensilios de Cocina
DIFERENTES TÉCNICAS QUE PERMITIRÁN
SENTIR EL OLOR A LIMPIO EN NUESTRA COCINA.
Consejos para limpiar y eliminar el mal olor
en la cocina
Mantener
la cocina y los utensilios limpios es una tarea tediosa, pero fundamental para evitar
infecciones y sobre todo para que las cucarachas no se instalen como huéspedes
en nuestra casa. Los productos para la limpieza suelen ser muy efectivos para
la desinfección, pero no tanto para quitar el mal olor de algunos utensilios.
Aquí te indicamos algunos consejos al respecto:
Para eliminar el olor a ajo de los cuchillos, se deben
pasar varias veces por una zanahoria cruda y éste desaparecerá.
Para
quitarle el mal
olor a los recipientes herméticos, ya sea fiambreras,
cantimploras, tapers o cualquier otro recipiente cerrado, colocar dentro un
poco de agua y una cucharada de sal de frutas, cerrar y agitar vigorosamente.
Luego, vaciar y aclarar varias veces.
Para que
el cubo de la basura no huela mal,
una vez que se haya lavado bien con agua y cloro, se debe echar un poco de
bicarbonato en el fondo del mismo.
Siempre es
recomendable lavar los platos en un plazo no mayor de 2 hs luego de haberlos
utilizado y no dejar que se acumulen, ya que el alimento que queda en el plato
genera alimentación a las bacterias provocando que éstas se multipliquen. Por
otro lado, es conveniente lavar todos los platos juntos y no tocarlos mientras
se secan.
Las tablas
de madera para cortar verduras, carnes, pescados, etc. conservan la humedad y
esto las convierte en lugares propicios para la proliferación de bacterias.
Siempre es recomendable lavarlas bien luego de utilizarlas y dejar que se
sequen completamente. Para ello a veces es conveniente tener a mano dos tablas
para que siempre haya alguna seca y lista para usar.
Para mantener las tazas y platos limpios,
primero se humedece un trapo en agua y se pasa luego por un poco de
bicarbonato. Después se procede a frotarlo sobre las manchas de té o café que
hayan quedado en la vajilla.
Otra
manera de eliminar los olores de los utensilios todos juntos y de una vez, es
colocando 1/4 taza de jugo de limón en el agua que se utiliza para lavarlos.
Por
último, para quitarles las manchas o sombras a
los vasos, hay que remojarlos durante una hora o más en vinagre
blanco levemente tibio. Luego, con una esponja de red, de nylon o escobilla
plástica para platos procedemos a quitar la película que pueda quedar en las
copas.
Cómo
cuidar y limpiar los utensilios de aluminio
El
aluminio es un material muy utilizado en utensilios de cocina. Veamos cómo
mantenerlos limpios y cuidados con estos consejos.
Utensilios de aluminio
Los
elementos y utensilios de aluminio son, mayormente, utilizados en las
cocinas. Se trata de elementos livianos y convenientes, que se calientan y
enfrían más rápidamente que otros metales y aleaciones. Sin embargo, también se
trata de elementos delicados, que pueden mancharse y abollarse con simples
golpes, o con el propio uso.
Los
utensilios y elementos nuevos de aluminio tienen un aspecto impecable,
brillante y muy vistoso. Para su limpieza, bastará
frotarlos con una esponja embebida en agua tibia y jabón, un enjuague adecuado,
y un secado con paños limpios de fibras suaves, para eliminar las características manchas
de agua evaporada. Pueden ser almacenados, virtualmente, en
cualquier sitio del hogar, por su alta resistencia a los climas extremos.
Al usar elementos y utensilios de aluminio,
evita golpearlos con otros utensilios o dejarlos caer. Evita rasparlos con
esponjas metálicas, elementos corrosivos o astringentes, y también procura no
arrastrar elementos con filo o puntas pronunciadas, pues podrían marcar y
alterar las superficies.
Pero
cuando les vamos dando uso van perdiendo ese brillo. El interior de las
cacerolas y olas suele oscurecerse, mientras que el exterior pierde ese aspecto
vistoso. Por ello, podemos dar una limpieza profunda al aluminio con
esta técnica.
Comienza
lavando adecuadamente todos los elementos de aluminio, con agua tibia o cálida
y jabón. Luego del enjuague, sécalos con un paño suave, limpio y seco. Para
agilizar la tarea, realiza una acción en cadena con todos los elementos de
aluminio del hogar, una vez cada tres a cuatro meses, o con la regularidad que
así lo desees.
En
un contenedor de vidrio, y utilizando guantes de látex, barbijos, lentes o los
elementos de seguridad que necesites (según tu sensibilidad a los productos),
mezcla un litro de agua con una cucharada de crémor tártaro, de vinagre (de
preferencia: blanco de alcohol) o zumo fresco de limón. Estas cantidades son
relativas, pues deben ser suficientes para llenar la capacidad de la olla o
para sumergir los elementos y utensilios. Puedes prepararla también en baldes o
palanganas, dependiendo de la cantidad necesaria.
Llena
entonces la cacerola a limpiar. Aprovecha para colocar dentro los utensilios de
aluminio, si fuera necesario. Luego, lleva la cacerola al fuego, entre lento y
medio, hasta que rompa hervor. Deja hirviendo por unos 10 minutos, observando
sólo el interior de la olla que se torna cada vez más brillante y limpio.
Luego, retira del calor y deja enfriar naturalmente.
Cuando
el agua esté fría, elimínala y frota el interior de la olla (o los elementos)
con una esponja de aluminio o acero inoxidable, enérgicamente aunque son
suavidad, sin hacer demasiada presión. Cuando frotes, haz movimientos lineales,
verticales u horizontales, pero no circulares, ya que podrías marcar la
superficie de la olla.
Puedes
complementar la limpieza de
utensilios de aluminio espolvoreando con bicarbonato de sodio antes
de frotar. Finaliza la tarea lavando con agua tibia y jabón, secando luego,
para que de este modo, tus elementos y utensilios queden como nuevos.
Cómo
limpiar los armarios de la cocina
Los
armarios de nuestra cocina necesitan que los limpien a fondo una vez al mes, ya
que los restos de alimentos, sobre todo los dulces, atraen fácilmente todo tipo
de insectos
Consejos para limpiar los armarios o alacenas de la cocina
Antes de
comenzar a limpiar debemos limpiar nuestro armario de cocina y vaciarlos
completamente.
Limpie el armario, cajones, y el
fondo con un paño humedecido en un detergente suave, luego seque con otro paño
suave y deje las puertas abiertas hasta que esté totalmente seco.
Si utiliza
un paño demasiado húmedo, el agua puede penetrar en las ranuras del armario y
provocar que éste se hinche.
Tenga en
cuenta que los medios abrasivos o diluyentes pueden ser perjudiciales para el
cuidado de sus muebles. Si desea usarlos, pruebe en algún pequeño lugar y
controle la reacción del mismo sobre la superficie.
Otra
recomendación, abra cada tanto los armarios y ventile bien la cocina, así
evitará malos olores producidos por el encierro.
Cómo
Limpiar los Extractores de Cocina
Si el
extractor no está limpio no cumplirá la función para la cual lo adquirimos, y
nuestra cocina se llenará de vapores y olores molestos. Veamos cómo limpiarlo
Pasos para Limpiar los Extractores de Cocina
El extractor de cocina debe
mantenerse limpio, y una higiene periódica será suficiente para evitar
problemas futuros.
Lo primero
que debes hacer es desconectar
el extractor.
Para
limpiar el exterior, utiliza un desengrasante de cocina.
Luego, retira las rejillas que sirven de filtro y
humedécelas con un anti grasa (un rociador es ideal para estos casos), y deja
actuar. Con un cepillo pequeño de cerdas no muy blandas, procede a cepillar la
rejilla para eliminar todo rastro de grasa. Aclara bien y deja secar.
Antes de volver a colocar la rejilla, limpia el
interior de la campana. En este caso, también puedes aplicar el anti grasa,
pero corres el riesgo de mojar el motor. Lo mejor es humedecer una esponja con anti
grasa o amoniaco, y limpiar con cuidado.
Ahora,
coloca la rejilla. Notarás lo bien que comenzará a funcionar. Repite esta
operación apenas notes que los olores comienzan a acumularse en tu cocina por más
que el extractor esté en funcionamiento.
Nota: Cada vez que cocines, utilices o no el
extractor, limpia la parte externa de la campana con un paño con desengrasante,
para evitar que la grasa se acumule y sea más difícil retirarla en el momento
de la limpieza a fondo.
Cómo
limpiar los armarios de la cocina
Los
armarios de nuestra cocina necesitan que los limpien a fondo una vez al mes, ya
que los restos de alimentos, sobre todo los dulces, atraen fácilmente todo tipo
de insectos.
Consejos para limpiar los armarios o alacenas de la cocina
Antes de
comenzar a limpiar debemos limpiar nuestro armario de cocina y vaciarlos
completamente.
Limpie el armario, cajones, y el
fondo con un paño humedecido en un detergente suave, luego seque con otro paño
suave y deje las puertas abiertas hasta que esté totalmente seco.
Si utiliza
un paño demasiado húmedo, el agua puede penetrar en las ranuras del armario y
provocar que éste se hinche.
Tenga en
cuenta que los medios abrasivos o diluyentes pueden ser perjudiciales para el
cuidado de sus muebles. Si desea usarlos, pruebe en algún pequeño lugar y
controle la reacción del mismo sobre la superficie.
Otra
recomendación, abra cada tanto los armarios y ventile bien la cocina, así
evitará malos olores producidos por el encierro.
Cómo
Limpiar los Quemadores de la Cocina
Los
limpiadores de cocina deben lucir limpios y libres de grasa si deseamos un
lugar reluciente.
Rucos para Limpiar los Quemadores de la Cocina
Además de
la cocina, debemos también hacer una limpieza
profunda de los quemadores que
suelen ensuciarse con la misma grasa y alimento. Hay varias formas, te recomendamos
probarlas y quedarte con la que mejor actúa sobre la suciedad de tus quemadores
Para
limpiarlos, lo primero es retirarlos de la cocina. En un bol coloca el jugo de un limón mezclado con un poco de agua
caliente y frota los quemadores con esta mezcla.
La grasa se desprenderá con mayor facilidad.
Otra forma
es encenderlos para que se calienten un poco, apaga el fuego y retíralos con
cuidado para no quemarte. Luego, limpia con esponja de acero embebida en
vinagre, o vierte
el vinagre directamente encima de los quemadores. Por último,
frota con la esponja.
Si la
grasa se encuentra muy adherida, conviene colocarlos en remojo dentro de una
mezcla de jugo de limón o vinagre con agua caliente. Así, la grasa irá
aflojando y luego se podrán cepillar.
Para que
estén impecables y no obstruyan la salida de gas, debes mantenerlos limpios. La
tarea de limpiar los
quemadores debe hacerse en forma
regular y constante.
CÓMO LIMPIAR LOS RECIPIENTES DE PLÁSTICOS MANCHADOS
Lavar los
recipientes que hemos utilizado para cocinar no es seguramente la parte más
agradable la cocina, y si a eso le sumamos que nos quedan manchados, el ánimo
va empeorando. Pero a no preocuparse que esto tenga solución.
Trucos para eliminar las manchas de los recipientes plásticos
Si tus recipientes plásticos han
quedado percutidos con manchas de té, salsas, tomate o alguna otra comida, te
contamos dos secretos para que te queden como nuevos.
Para
eliminar esas manchas molestas y que avejentan los plásticos, solo tienes que
mezclar un poco de lavandina o lejía con una mayor parte de agua caliente
dentro del recipiente plástico, y dejarlo reposar un tiempo. Mucho mejor si
dejas actuar la mezcla durante toda la noche. Luego, procedes a enjuagar con
abundante agua para que no queden resto de la preparación de agua con lejía.
Si las
manchas no son muy fuertes, puedes probar lavando tus recipientes como lo haces
habitualmente, luego los expones al sol y las manchas desaparecerán.
Cómo
limpiar recipientes de plástico
Tus
recipientes de plástico multiuso necesitan ser renovados, aprende como limpiar
sus manchas
Limpiar recipientes de plástico
En todos
los hogares podemos encontrar recipientes o bolas de plásticos. Éstos son muy
útiles a la hora de guardar alimentos para la heladera o para llevar a un día
de campo.
Pero el
plástico es un elemento que se va manchando con el tiempo, el uso y los mismos
alimentos suelen dejar su sello en los mismos. Esto ocasiona que su aspecto no
sea el mejor y no podamos usarlo o llevarlos a donde deseamos, y lo peor, es
que suelen quedar archivados, ocupando lugar en algún lugar de la casa.
NORMATIVIDAD
Normatividad para productos de
aseo, higiene y limpieza o productos de desinfección y esterilización
|
El desarrollo de los servicios personales de estética
facial, corporal y ornamental está relacionado con el uso de productos para
aseo, higiene, limpieza, desinfección o esterilización”.
Estos productos se utilizan para la implementación de
técnicas de asepsia en cada uno de los elementos de trabajo según su riesgo,
así como con las técnicas de higiene de manos, según se establece en la Resolución 2827 de 2006,
por la cual se establece el manual de bioseguridad para establecimientos que
desarrollen actividades cosméticas o con fines de embellecimiento facial,
capilar, corporal y ornamental”.

Para entender cuál es la normatividad aplicable para cada
uno de los productos de aseo, higiene, limpieza, desinfección o esterilización
se requiere diferenciar aquellos de uso doméstico de los de uso
industrial:
1. Producto de aseo, higiene y limpieza de uso industrial:
“Es aquella formulación cuya
función principal es remover la suciedad y propender por el cuidado de la
maquinaria industrial e instalaciones, centros educativos, hospitalarios, etc.,
que cumple los siguientes requisitos:
1. Mercado: No está dirigido a
productos de aseo, higiene y limpieza de uso doméstico.
2. Sistema de distribución y
comercialización: Esta dirigido única y exclusivamente al sector industrial.
3. Composición: La cantidad de
ingrediente activo es diferente en cuanto a concentración, con respecto a los
productos de aseo, higiene y limpieza de uso doméstico.
4. Uso del producto: Se
realiza única y exclusivamente a través de máquinas, equipos o personal
especializados.
Tomado de: Circular Externa DG-0100-284 del 23/10/2002
– Dirección General INVIMA
Estos productos no se encuentran regulados dentro de un
régimen de registros sanitarios, siempre y cuando se cumplan todas las 4
características anteriores.
2. Producto de higiene doméstica:
La Decisión 706 de 2008
de la Comunidad Andina de Naciones, CAN, estableció la Armonización de
Legislaciones en Materia de Productos de Higiene Doméstica y Productos Absorbentes
de Higiene Personal.
Qué es un producto de higiene
doméstica?
La Decisión 706 de 2008 establece en su artículo 2 la
definición de producto de higiene doméstica de la siguiente manera:
“Es aquella formulación cuya
función principal es remover la suciedad, desinfectar, aromatizar el ambiente y
propender el cuidado de utensilios, objetos, ropas o áreas que posteriormente
estarán en contacto con el ser humano independiente de su presentación
comercial.
Esta definición no incluye
aquellos productos cuya formulación tiene por función principal el remover la
suciedad, desinfectar y propender el cuidado de la maquinaria e instalaciones
industriales y comerciales, centros educativos, hospitalarios, salud pública y
otros de uso en procesos industriales”.
Qué se considera producto de
higiene doméstica?
La Decisión 706 de 2008 estableció en su anexo No.1 la
lista indicativa de grupos de productos de higiene doméstica y productos
absorbentes de higiene personal:

Jabones y detergentes.
Productos lavavajillas y
pulidores de cocina.
Suavizantes y productos para
prelavado y preplanchado de ropa.
Ambientadores.
Blanqueadores y quitamanchas.
Productos de higiene doméstica
con propiedad desinfectante.
Limpiadores de superficies.
Productos absorbentes de
higiene personal (toallas higiénicas, pañales desechables, tampones,
protectores de flujos íntimos, pañitos húmedos) siempre y cuando no declaren
propiedades cosméticas ni indicaciones terapéuticas.
Los demás que determine la
Secretaría General de la Comunidad Andina mediante Resolución, por solicitud y
consenso de las Autoridades Sanitarias de los Países Miembros.
Cuáles son los requisitos que
deben cumplir los productos de higiene doméstica?
La Decisión 706 de 2008 estableció en su artículo 5° que:
“Los productos a los que se refiere la
presente Decisión requieren, para su comercialización y/o importación, de
la Notificación Sanitaria Obligatoria (NSO) presentada ante la Autoridad
Nacional Competente del primer País Miembro de comercialización.”
Qué se entiende por
Notificación Sanitaria Obligatoria?
“Es la comunicación en la cual
se informa a las Autoridades Nacionales Competentes, mediante declaración
jurada, que un producto regulado por la presente Decisión, será comercializado
por el interesado.”
Tomado de: Artículo 2 – Decisión 706 de 2008.
3. Productos para desinfección y/o esterilización de
aparatología estética:
Todo producto o equipo que se utilice para desinfección
y/o esterilización de aparatología de uso en estética se considera también como
dispositivo médico y por lo tanto se encuentra regulado por el Decreto 4725 de 2005
4. Productos
para higiene de manos:Según la
técnica escogida para efectuar higiene de manos (Hipervínculo a glosario donde
se defina higiene de manos) en los servicios personales de belleza, los
productos utilizados para ello caen dentro de diferentes categorías:
Productos cosméticos
En ellos se incluyen jabones o geles convencionales o
antibacteriales que declaren propiedades cosméticas. Se encuentran catalogados
como “Cosméticos para el aseo e higiene corporal” y se encuentran regulados por
la Decisión 516 de 2002 de
la Comunidad Andina de Naciones, CAN.
Medicamentos:
En ellos se incluyen productos como jabones antisépticos
y geles antisépticos para realizar lavado antiséptico y fricción
antiséptica de manos (Ver documento sobre higiene de manos)
PASOS DE LIMPIEZA
PASO A PASO COMO LIMPIAR LA COCINA
1º) Por donde empezar a limpiar:
Cada
uno tendrá sus preferencias, particularmente comienzo con el horno, siempre que
no tenga cacharros sucios, sino limpiar y colocar los cacharros en el
escurridor de platos o acomodar en el lavavajillas.
|
En
cuánto al horno, si tuvimos la precaución de limpiarlo luego de usarlo
posiblemente con un paño humedecido en bicarbonato sódico será suficiente. En
cambio si tiene grasa incrustada, hay que encender el horno hasta que tome un poco
de temperatura, apagar y aplicar antigrasa o lavavajillas, dejar actuar y
aclarar con abundante agua. Otra opción: con el horno frío primero retirar con
papel de cocina la grasa acumulada, con agua caliente y lavavajillas limpiar
las paredes interiores y la puerta del horno. Aclarar hasta que quede brilloso
y secar con un paño seco.
Para
las rejillas y las fuentes de horno utilizar el limpiador cremoso o el
lavavajillas
Malos olores: Cuando el horno toma
mal olor colocar unos trozos de piel de naranja o limón con el horno encendido
a temperatura media, perfumará su cocina
2º) Limpar la zona de fuego Las cocinas actuales pueden ser de gas
o vitro cerámicas. Dependiendo del sistema que utilicen serán los métodos de
limpieza.
Hornillas a gas: Si las cocinas son de
hornillas a gas retire los quemadores y las tapas superiores y con un poco de
limpiador cremoso o en polvo fregar la zona donde se colocan las hornillas,
aclarar y colocar los accesorios previamente lavados.
Las vitroceramica siempre deben limpiarse
en frío y cada vez que se ha utilizado, estas precauciones impiden que se
produzcan incrustaciones difíciles de sacar. Cuando se derrama leche, azúcar o
se pegue un plástico hay que proceder a retirar inmediatamente con una
rasqueta, no espere a que se enfrié.
Puede
limpiar rociando la superficie con cualquiera de los productos comerciales que
hay en el mercado y retirar con papel de cocina. Si se ha quedado sin producto,
rociar con amoniaco o jabón para lavar la ropa y dejar actuar por una hora,
aclarar y secar con un paño.
3º) Limpiar el alicatado:
Aplicar
antigrasa en el alicatado de la zona donde esta la cocina, deje actuar unos
minutos. Si hay incrustaciones muy rebeldes remover con una esponja de acero,
no olvidar las juntas de los azulejos, es el lugar donde más se adhiere la
grasa. Aclarar con un paño hasta que quede con brillo. Salvo la zona más
cercana a la zona de fuego, en el resto del alicatado bastará pasar un paño con
algún desinfectante y aclarar después. Para que los azulejos queden bien
brillantes aclarar con agua y unas gotas de vinagre blanco y luego sacar.
4º) Limpiar el extractor:
Si el extractor de la
cocina esta sucio, impide la correcta eliminación de vapores y olores. Siempre
antes de limpiar el extractor recuerde desenchufar o desconectar el interruptor
de contacto. Cada vez que cocine pasar un paño humedecido con desengrasante por
la campana del extractor para que no se acumule la grasa, una vez a la semana
es conveniente limpiarlo a fondo.
Retirar
las rejillas que actúan de filtro, son muy fáciles de quitar, rociar con un
antigrasa y dejar actuar. Mientras tanto limpiar el interior de la campana con
una esponja humedecida con amoniaco, cuidado de no mojar el motor. Secar y
limpiar el exterior de la campana, si es de acero inoxidable, utilizar agua con
una cucharadita de bicarbonato. Remover la grasa de las rejillas con un cepillo
pequeño, aclarar con agua bien caliente y dejar secar bien, luego colocar en su
lugar
5º) Limpiar las lámparas de la cocina:
En las cocinas la
grasa y los vapores se van para arriba ubicándose en las partes más altas de la
cocina. Los fluorescentes o lámparas de techo en la cocina necesitan un aseo
frecuente por esta razón. Siempre deberán estar apagados y fríos, para su
limpieza puede utilizar limpia cristales o bien alcohol de quemar que arrastra
con facilidad la grasa incrustada.
6º) Limpiar las encimeras:
Las encimeras deberán
estar despejadas para facilitar su limpieza. No utilizar cuchillos para retirar
incrustaciones, puede frotar con una esponja de nylon especial para superficies
delicadas.
Las encimeras de mármol son muy delicadas,
necesitan un tratamiento para impermeabilizar su porosidad. Limpiar con un paño
con agua jabonoso (con lavavajillas), aclarar y secar inmediatamente.
Las encimeras plastificadas: son especiales para
limpiar con agua y una cucharadita de bicarbonato para luego aclarar con agua y
secar.
Las encimeras de maderas como el arce, teca o
caoba: Una vez al año deberá limpiarse con aceite de teca o linaza en el
sentido de la veta de la madera.
7º) Limpiar los armarios:
En los armarios siempre se acumulan migas,
restos de alimentos, especialmente los que son en polvo o molidos como el
azúcar, sal, café. etc. Una vez al mes es conveniente retirar estos restos para
prevenir la aparición de insectos. Vaciar los armarios y repasar con un trapo
humedecido con lavavajillas, aclarar y secar. Antes de guardar las cosas en los
armarios dejar secar bien su interior. Al mismo tiempo es buen momento para
repasar las fechas de caducidad de los alimentos enlatados que pudiera haber en
la alacena. Repasar las latas y demás cosas con un paño húmedo para evitar que
se le acumule grasa, antes de guardar su base tiene que estar bien seca para
que no marque el suelo de los armarios.
lunes, 4 de agosto de 2014
domingo, 3 de agosto de 2014
PASOS PARA LAVAR LOZA
PASOS PARA LAVAR LOZA
1. Prealistar. Es opcional usar guantes de goma al lavar los platos. Pueden ser muy útiles cuando tienes las manos muy resecas o alguna enfermedad en las manos. Si estás usando mangas largas, arremángatelas o ponlas debajo de los guantes. Los delantales también son opcionales.
2. DESCOMIDAR: Raspa todos los pedazos grandes de comida que están en los platos y ponlos en el basurero, en lugar de ensuciar tu esponja/cepillo y el agua
3. ADICIONAR: Llena el fregadero con agua y con una buena cantidad de detergente. Usa una temperatura alta que puedas tolerar cómodamente, pero no te quemes. Entre más caliente esté el agua, es mejor para la sanidad y para cortar la grasa. Usa guantes de goma para proteger tus manos si el agua está muy caliente para ser tocada.
Coloca los objetos más grandes y con comida dentro del fregadero para que se remojen en el agua caliente. Esto facilitará su limpieza.
4. Empieza con los cubiertos. Como van en la boca, el agua necesita ser la más limpia y caliente posible
- En general, sumerge el objeto en el agua para después limpiarlo. Límpialo vigorosamente mientras esté en el agua.
- Retíralo del agua y revísalo. Si todavía está sucio, frótalo con una esponja o algún otro utensilio, hasta que esté limpio.
- Si es muy difícil quitarle la comida, llénalo con agua. Después usa tus dedos (¡no tus uñas!) y quítale lo sucio.
- Si no funciona una esponja de hierro. No uses la parte trasera de la esponja, porque los pedazos de comida se quedarán en él.
5. Después, lava los otros objetos que tocan la boca, como las tazas y vasos, para que puedan beneficiarse con el agua limpia y caliente.
6. Cambiar regularmente tu agua es esencial para mantener un ambiente higiénico para la limpieza
7. Lava las ollas y las sartenes ya que ensuciarán el agua. Primero deja que se remojen. Si algo se quemó en alguna olla o cacerola, ponle un poco más de jabón y agua y déjala remojando mientras lavas otros platos.
8. Coloca los platos en una rejilla para escurrir, después sécalos con una toalla limpia y seca.
9. Cuando los platos están limpios, no deben de tener ninguna materia visible ni estar grasosos. Desliza tu mano en los platos para verificar que tengan un poco de resistencia. Si tus dedos se deslizan muy fluidamente y sin chirridos, es probable
10. que aún tenga grasa y deberías de considerar volverlo a lavar.
11. Enjuaga el cepillo, la esponja o el trapo y deja que se seque. Puede ser una buena idea estilizar tu equipo de vez en cuando, ya sea que uses agua hirviendo o cloro. Cuando una esponja o cepillo empieza a oler feo y el olor no se quita al lavarlo, tíralo.
MÉTODO DOS: USAR UNA MÁQUINA LAVAVAJILLAS
1. Cárgala. Claro, lavar los platos a mano es un gran momento. ¿A quién no le gusta mojarse los brazos hasta el codo con agua caliente y jabonosa? Para aquellos que tienen un lavavajillas, la respuesta es “¡a mí no!”
2. Llena tu lavavajillas lógicamente. Todos los lavavajillas son distintos y todos tenemos maneras favoritas de hacer las cosas. Establece una rutina y úsala la mayoría de las veces. Aquí hay algunas cosas que debes de considerar:
¿Cómo funciona tu lavavajillas? Algunos tienen un par de brazos que arrojan el agua desde abajo, mientras que otros tienen un brazo en la parte inferior que arroja agua hacia arriba y un brazo arriba que arroja agua hacia abajo.
Muchas lavavajillas tienen una variedad de espacios para acomodar tazones grandes, tazones pequeños, utensilios y platos de distintos tamaños – en la parte inferior. la parte superior es para objetos más pequeños como vasos, tazas, jarras y utensilios largos como espátulas y cucharas para revolver.
- No pongas demasiados platos. Llena tu lavavajillas, pero no lo abarrotes – vas a maximizar la capacidad de tu lavavajillas y minimizar el uso excesivo de agua.
- Agrega el detergente. Llena el depósito de detergente con tu producto favorito – líquido en polvo o cápsulas – y ciérralo.
- Puedes agregar más jabón en una taza secundaria si tus platos están exageradamente sucios.
- Agrega un agente de enjuague para prevenir las salpicaduras, si es necesario
- Préndela. Ajusta el temporizador si es necesario – menos tiempo para una carga ligera de platos no tan sucios o más tiempo para una carga pesada de platos, ollas y sartenes.
- Seca los platos. Puedes usar un secado con calor (pero ten cuidado con los platos o contenedores de plástico) o sécalos al aire. Los platos se secarán relativamente rápido, ya que la lavavajillas suele ser calentada a 140°F.
MÉTODO TRES: LAVAR OLLAS Y SARTENES DE HIERRO
1. Lavar ollas y sartenes de hierro requieren de un método distinto porque quieres desarrollar lo que se conoce como patina, o capa de aceite, en la superficie del sartén. Lavar el recipiente con detergente y agua impedirá que se desarrolle la patina.
2. Llena la olla con suficiente agua para que esté casi llena.
3. Colócala en la hornilla, prende el fuego a medio-alto y cubre
4. Espera hasta que el agua en la olla esté hirviendo. Con una espátula de hierro, raspa la comida que está en el fondo y en los lados de la olla.
5. Tira el agua de la olla y vuélvela a poner en la hornilla, a fuego bajo.
6. Limpia cualquier residuo que esté en el fondo de la olla con una toalla de papel, ten cuidado de no quemarte. Apaga la hornilla.
7. Cubre el fondo y los lados de la olla con una capa delgada de aceite, preferentemente en aerosol y limpia el exceso de aceite con una toalla de papel.
Consejos
- Si usas un plato para servir algo que es difícil de quitar, llena el plato con agua o déjalo en remojo después de usarlo. Esto evita que la comida se endurezca y sea más difícil de limpiar. Es mejor enjuagar los platos después de usarlos para quitarles los residuos de comida y evitar que se endurezca y sea más difícil de quitar.
- Si necesitas usar tus platos inmediatamente después de lavarlos, usa una toalla de lino limpia para secarlos. El lino no deja residuos ni pelusas.
- Debes de tener cuidado con la madera. No debes de remojarla y debes de secarla muy bien antes de guardarla. Esto probablemente necesitará que la seques con una toalla y al aire en una rejilla. Es recomendable girar los objetos de madera tan rápido como se sequen ya que suelen estar en contacto con charcos de madera.
- Lava todas las partes de los objetos. Sólo porque crees que nada ha pasado en la agarradera del tenedor en la parte inferior del plano no significa que estén limpios.
- Elige tus herramientas sabiamente y úsalas en combinación, si es necesario. Cada utensilio de lavado tiene sus ventajas y problemas.
- Después de que creas que un objeto está limpio, desliza tu mano sobre las áreas seguras (¡no los bordes de los cuchillos!) una vez más. A menudo pasa que todavía tienen comida que no puedes ver, pero que sí puedes sentir.
- Si estás colocando unos platos recién lavados a un lado del fregadero sobre las rejillas, es una buena idea tener una solución de agua y vinagre. Esto ayudará a desinfectar mejor los platos recién lavados y a darles un aspecto brillante.
Advertencias
- Las bacterias crecerán rápidamente en las esponjas, los trapos y los cepillos. Puedes reducir el crecimiento de las bacterias enjuagando, apretando/agitando después de usarlas y colocándolas en un lugar seco. Para una mejor limpieza, pon las esponjas mojadas en el microondas por 2 minutos o usa la lavavajillas. Si las metes al microondas, ten cuidado de que la esponja o el trapo no se sequen. Ten cuidado cuando abras el microondas, la esponja o el trapo podrían estar muy calientes e incluso podrían emitir vapor.
- No pongas los cuchillos en el agua hasta que los vayas a lavar, sólo coloca el cuchillo que estás limpiando en el agua. Si se te caen los cuchillos en el tazón con agua y jabón (probablemente sucia) con otros objetos, es posible que los pierdas de vista y te cortes.
- Nunca metas tu mano alrededor del a parte inferior del disipador, ya que podrías herirte con los utensilios filosos.
- Reemplaza todos los utensilios de lavado regularmente cada varios meses. Si notas un olor desagradable y aunque los laves no se les quita, tíralos.
- Como alternativa, coloca un trapo o esponja en agua hirviendo por 10 minutos o moja una parte de cloro con 9 partes de agua (1:9, 10%) y enjuaga muy bien. El blanqueamiento eliminará rápidamente cualquier producto a base de látex.
- Platos para lavar
- Un fregadero o tazón para lavar
- Agua muy caliente y agua fría para controlar la temperatura
- Líquido para lavar
- Cepillo para lavar
- Esponja o trapo
- Tazón para lavar para ponerlo en el fregadero (opcional)
- Estropajo (opcional)
- Cáustica, para uso pesado, químico de limpieza (opcional)
- Cloro (opcional)
- Guantes de goma(si usas cáustica y cloro o si no quieres mojarte las manos)
- Delantal (opcional)
Suscribirse a:
Entradas (Atom)